¿Ayuso o Feijóo? Los dos
Ramón Pérez-Maura. – Como bien decía en estas páginas el pasado lunes Luis Ventoso en su columna «¿Feijóo o Ayuso?» es muy habitual oír críticas a Alberto Núñez Feijóo diciendo que debería ser sustituido por Isabel Díaz Ayuso «porque tiene mucha más fuerza que él», «porque se come a la izquierda» y por todo tipo de razones más o menos entusiásticas. No diré que no comparta yo el entusiasmo que despierta Isabel Díaz Ayuso. Tengo contado que el día que la nombró candidata a presidir la Comunidad de Madrid ¡Pablo Casado! creí que se había vuelto loco. La realidad se ha demostrado muy diferente de lo que entonces pensamos algunos y los hechos han demostrado que fue el mayor acierto político de Casado. Que paradójicamente le costó su puesto.
Isabel Díaz Ayuso se llevó por delante a Pablo Casado. Justificado o no, aquel enfrentamiento entre ambos llenó la calle de manifestantes pidiendo la dimisión del presidente del Partido Popular. Lo nunca visto. Las bases de un partido tomando la calle contra su propio presidente. Si en ese momento Díaz Ayuso hubiera querido dar el paso al frente, creo que nadie la podría haber parado. Pero ella se echó a un lado y apoyó la Presidencia de Alberto Núñez Feijóo que abandonó la Junta de Galicia para afrontar este morlaco de la peor calaña que reside en la Moncloa.
¿Se imaginan que Díaz Ayuso aceptase de cualquier manera participar en una actuación para echar a Núñez Feijóo de la Presidencia del PP y que ella ocupase el sillón? Apuesto a que cuando menos la llamarían Calígula por la cantidad de muertos relevantes que acumularía.
Pero hay otra razón muy importante. Díaz Ayuso tiene en este momento una plataforma inmejorable: el Gobierno de la Comunidad de Madrid donde lo está haciendo tan bien que difícilmente podría mejorarse su gestión. Razón por la que despierta el odio de Pedro Sánchez: hay comparaciones insoportables. Y la Presidencia de la Comunidad es un altavoz imbatible. Si mañana dejara esa Presidencia para convertirse en presidente del Partido Popular en toda España se quedaría sin esa fuerza que le da la Comunidad. Que es exactamente lo que le pasa a Alberto Núñez Feijóo. Él tiene que hacer política sin capacidad de gestionar ninguna institución que cuenta con un presupuesto y desde la que se visibilizan sus éxitos. Si mañana Isabel Díaz Ayuso se convirtiera en lo que hoy es Núñez Feijóo, su situación sería la misma que la de don Alberto. Y eso no sería bueno ni para Feijóo, ni para Ayuso ni para España.
Así que, para disgusto de muchísimos de nuestros comentaristas, lo más sensato, a mi modo de ver, es que Núñez Feijóo y Díaz Ayuso sigan trabajando juntos como hasta ahora. Que capten votos de diferentes ámbitos del espectro político y que el electorado de centro y derecha se dé cuenta de que, si no se le roba voto al PSOE, Sánchez seguirá en la Moncloa hasta el día del juicio final. Se admiten apuestas.