Cómo ha jodido a la chusma zurda la Cabalgata de Reyes de Sevilla (VIDEO)
AD.- ¡La que ha liado Sevilla en su Cabalgata de Reyes! Cómo habrá sido para que la mafia progre esté que trina ante el advenimiento de una forma de celebrar la Cabalgata que ya es, junto con la Feria de Abril y la Semana Santa, uno de los principales reclamos de la capital hispalense. Sevilla ha zanjado con un golpe en la mesa la prevalencia o no de los Reyes Magos sobre el gordinflón barbado pasado de copas. Y lo ha hecho como sólo Sevilla sabe hacer las cosas: de forma estruendosamente alegre, al compás de las fanfarrias y en medio de una dana de confetis y purpurina. Qué manera de reivindicar la tradición hecha fiesta frente a los zurdos que quieren acabar con todo lo que mínimamente tenga un valor emocional; es decir, un valor saludable y decente. (PINCHE AQUÍ PARA VER EL VIDEO)
Sevilla y Andalucía nos reconcilian con el presente y también con la agradable idea de que acaso no todo está perdido. Las pastorales han tomado de nuevo las calles, las zambombás jerezanas se multiplican cada año, las iglesias se abarrotan y el sonido envolvente de los villancicos añejos cubre todos los rincones. Se revive la fe y la esperanza en muchas familias, sobre todo en los ambientes rurales. Tal vez en estas cosas radique nuestra esperanza en que la tradición y nuestra identidad cultural colectiva sobreviva al empeño de masones y zurdos por reducirlas a escombros. Por eso Andalucía es con diferencia la comunidad española que con más esmero defiende su identidad colectiva, sus señas de identidad propias, lejos, muy lejos, de procesos secesionistas y hechos diferenciales. De Andalucía deberían aprender esas comunidades gobernadas por la peste nacionalista desde hace décadas, y que hablan y hablan de identidad, cuando ya la identidad catalana ha naufragado en un océano de sincretismo cultural y de rabiosa paganización. Andalucía se ha parapetado contra la cristianofobia que en otras zonas de España es cada vez más patente. En Andalucía se respetan los símbolos religiosos de la Navidad. La defensa de los valores europeos tiene en los andaluces a sus principales valedores.
Ocurre sin embargo que la mafia zurda ha perdido el reflejo vital y la visión de la calle. Como esos espejos cóncavos de feria que deforman la realidad, chapotean en una España virtual de ellos, ellas y elles, que sólo existe en sus corrompidas cabezas. Creen que pueden exorcizar los escándalos de corrupción que salpican de mierda al gobierno, utilizando la figura de Franco, como en uno de esos autos de fe del Santo Oficio. Le decía hace poco a una miembro de la Fundación Franco que nadie había hecho tanto por prestigiar e idealizar su figura que Sánchez. Existe ya en España un franquismo sociológico al que se adhiere, de forma entusiasta, cada día más jóvenes. Sólo a un tonto se le puede ocurrir la idea de contrapuntar la corrupta y criminal acción de este Gobierno con la tramposa rememoración de un periodo de nuestra historia que para millones de ciudadanos, es sinónimo de éxitos económicos, de bienestar familiar, de paz social, de pulcritud moral, de derecho a la vida, de identidad cultural férreamente defendida y, en definitiva, de un país que pasó de los piojos de la II República a ser el de mayor crecimiento europeo y la novena potencia económica mundial.
El gran fracaso de la izquierda es su alejamiento de la España real. No soportan que uno de los reyes magos de Sevilla haga exhibición de su fe, pero en cambio habrían aplaudido hasta con las orejas la presencia de una carroza repleta de tíos enseñando el culo y tocados con un gorro de Papá Noel. Lo bueno, o lo malo para ellos, es que la gente normal les tiene muy calados y no entienden esa fijación con los católicos y esa fascinación por el islam.
Afortunadamente, la Cabalgata de Sevilla ha puesto las cosas en su sitio. A la chusma zurda se le ve el plumero cada vez más. Si se tatarea el himno de España al paso de la Policía Nacional, malo; si cientos de sevillanos cantan al son de Virgen de los Reyes las canciones de ese pasado feliz del que quieren que nos olvidemos, peor; si un rey mago se persigna ante un templo católico en una cabalgata que representa al Catolicismo, el acabóse. Sólo hay que verlos montando el pollo en sus medios generosamente regados con dinero público. Son patéticos. Han perdido el norte, la calle y el relato. Eso es lo que les jode.
Genial por Sevilla, aquí en Zaragoza, demasiados personajes perroflautas, tittiriteros, gente del submundo, enanitos, elfos, negritos de la selva bailando el tan, tan, chinitos de terracota y el paso de Los Reyes Magos fue muy normalito, aunque la gente les aclamaba…. Pasaron los bomberos y la policía con su banda de música, no estuvo mal, pero demasiado espectáculo fiestero, se notaba la ausencia del espíritu de la Epifanía del Señor. Bien por Sevilla !!
Zaragoza está tomada por la peor escoria de la izmierda criminal y cristófoba
Y, ante tanto dislate, la timidez de la jerarquía católica tiene a la Iglesia en la más suma irrelevancia pública. Creo que, tal como está el patio, vale más un solo laico cristiano valiente que un acarreto de obispos cobardes como la mayoría de los que hay en la Conferencia Episcopal española, de la que expurgando a unos pocos, para los que sobran dedos de una mano, son tan cobardes y enemigos de meterse en líos como sus afuncionariados sacerdotes de miseria
Vivan los Reyes Magos.
Viva Cristo Rey.