El Tribunal Supremo archiva la querella por injurias y calumnias contra Alvise Pérez por afirmar que Vox se financia ilegalmente
El Tribunal Supremo ha archivado este viernes la querella que por injurias y calumnias interpuso Vox y su líder, Santiago Abascal, contra Alvise Pérez, después de que el eurodiputado deslizase que habrían cobrado dinero de manera irregular del empresario Álvaro Romillo.
La Sala de lo Penal entiende que no hay indicios de delito en las varias declaraciones en que el principal dirigente de Se Acabó la Fiesta (Salf) dijo que la formación de derecha radical habría incurrido en cohecho o financiación ilegal a través de las empresas de Romillo.
El alto tribunal y la Fiscalía coinciden en descartar el carácter delictivo de estas afirmaciones porque “expresan sospechas” y “no tienen la precisión necesaria” para considerar que atribuyan “una concreta conducta” que encajaría con una financiación irregular de Vox o de corrupción por parte de Abascal.
Las palabras de Alvise representaron “juicios de valor” y los magistrados razonan que, a pesar de que no existe la libertad absoluta en la discusión pública, “la jurisprudencia europea entiende desproporcionado acudir a la sanción penal para corregir excesos” de manera general, “salvo situaciones” en que, ponen como ejemplo para marcar el límite, “media incitación a la violencia o se trata de discursos de odio”.
El parlamentario europeo de Salf publicó, entre otras cosas, en Twitter: “Hola, @Santi_ABASCAL; ¿puedes negar lo mismo de ti cuando entraste en Sentinel el día 16 las 17.20 horas?”.
Sentinel es una de las compañías de Romillo y, precisamente, sobre la que investiga, paralelamente, la Audiencia Nacional si de ella salieron los 100.000 euros en efectivo que habría cobrado Alvise para su campaña de las últimas europeas. Estos hechos son parte del ya conocido como “caso Madeira Invest Club”, cuya instrucción, bajo secreto de sumario, está al cargo del magistrado José Luis Calama.
Volviendo al resto de declaraciones del polémico político por las que se querelló Vox, en varios programas de televisión se defendió de estas acusaciones -efectuadas por el propio Romillo en una confesión ante la Fiscalía Anticorrupción- afirmando que “el PP qué se ha gastado, ocho o nueve millones de euros, y el PSOE y Vox (refiriéndose a la carrera electoral de las elecciones al Parlamento Europeo); bien, personas por cierto, muchas de ellas extorsionadas por este hombre (Romillo) porque, han ido a Sentinel, Dios sabe para qué han ido a Sentinel, ellos si eran políticos”.
Seguidamente, durante esta intervención, Alvise dio explicaciones sobre el supuesto cobro por su parte de esos miles de euros en metálico por este empresario, con un “yo era un autónomo que iba a cobrar un trabajo prestado y que no me dio factura y, meteré el IVA”.
Para luego contraponerlo con el caso de los citados partidos, entre ellos Vox, los que según Alvise “sí han cobrado siendo políticos, y eso si es un delito de cohecho y eso si puede ser un delito de financiación ilegal”. Por todo ello, Vox le llevó ante la Justicia, pero ahora el Supremo, donde está aforado el líder de Salf al tener escaño europeo, da carpetazo a su acción legal.