Uno de los motivos fundamentales sobre los que se apoya todo el hilo conductor de ‘La tesis prohinida’, que ayer se presentó en tierras de Málaga, es la pregunta de ¿por qué tenemos que soportar en esta grandiosa nación a una pandilla de terroristas que quieren dirigir nuestra política desde hace cincuenta años?

Es tarde ya cuando Rosa Díez advertía ayer: “ETA quiere tutelar nuestra democracia.” Sí, es tarde, y además sería una contradicción suponer que pudiera haber una democracia tutelada por la amenaza, el chantaje y el asesinato. Es tarde. Porque, efectivamente ETA ha dirigido los cambios históricos de España desde antes de la Transición y la izquierda de la que proviene Díez es esa que se alegró cuando el asesinato de Carrero, la que todavía repite orgullosa: “ese asesinato trajo esta democracia.” Y es que quizá sea la afinidad ideológica o mejor, la coincidencia de objetivos entre cierta izquierda y ETA lo que más daño está haciendo a España. Lo dijo con valentía uno de los pocos referentes morales que nos quedan, Francisco José Alcaraz: “ETA tiene el mismo objetivo que una parte de la izquierda y ese objetivo es acabar con España.”

¡Pues claro que ETA tutela la democracia, para eso se creó y para eso se les mantiene! Y los mismos terroristas se jactan, con razón, de sus éxitos contra España. No hay más que leer su comunicado de junio de 2003…Pero si es que siempre es la misma historia cada vez que se acercan las elecciones. ¿Acaso no es muy sospechosos el espacio mediático que se concede a esta banda asesina? Si se hubiera aplicado la misma política de sutil censura que se aplica a otros temas que no convienen a los poderosos, quizá hace tiempo que lo de ETA se hubiera acabado… Ahí les tenemos de nuevo, haciendo exigencias o lanzando sutiles amenazas que creemos están fundamentadas:

“Rajoy está al corriente y su reacción rompe su discurso negativo y agresivo y como tienen posibilidades de ser presidente debe actuar con responsabilidad.” Pero si esto es disparatado y escandaloso -¿qué responsabilidad puede exigir esta gentuza?- mucho más lo será que hubiera compromisos sobre lo que significa actuar con lo que creen los terroristas que es la responsabilidad. Y me temo que los hay y quizá por eso en el falso debate del pasado lunes el candidato popular no tocó este asunto ante el Ministro del Faisán… Y encima, los terroristas no engañan, porque nos dicen que “la ilegalización de la izquierda terrorista supuso una parada en el proceso y, aunque la lucha armada ha hecho su aportación, ha mostrado señales de agotamiento” y por eso ahora, por pura estrategia, anuncian que dejan de matar. Y tenemos a los idiotas, a los convenidos, y a los amigos de los terroristas, felices con un indignante apaño en la basura disfrazado de forma repulsiva con la palabra paz.

Mariano Rajoy estará utilizando silencios y ambigüedades como una estrategia –mala estrategia la de la falsedad o el engaño- pero si llega a Presidente, tendrá que encarar una gravísima situación y esperemos que no sean muchos los que tengan que arrepentirse de haber votado al Partido Popular. Hoy, al menos en Madrid, hay opciones que pueden permitir votar con la nariz un poco menos tapada…Solo un poco, ojo. La presencia Álvarez-Cascos en la manifestación de las Víctimas y sus declaraciones en campaña pueden suponer un buen toque de atención a las ambigüedades del PP desde la derecha, aunque tengo que reconocer que UPyD, en temas nacionales, está siendo un partido de referencia que aún así no debe engañar a los que estamos hartos del PP. Pero también se puede no votar o votar en blanco.

En fin, que no hay quien comprenda que una nación como España colabore directamente con sus principales enemigos a no ser que sea por aquello que dijo Carrero Blanco: “tenemos unas necias clases dirigentes que sirven a los enemigos…” Ya se vio que hablaba demasiado claro porque se lo cargaron y porque eso se sigue produciendo hoy en día, y como vemos, esas clases dirigentes, hasta en las más altas instancias, solo han buscado su propio enriquecimiento a costa de todos los españoles…Los casos de Urgangarin o de Pepiño solo son el ejemplo de estos últimos tiempos…

Espero, o mejor, quiero soñar que un día, en este país, se reflexiona sobre lo que de verdad nos está conduciendo a una ruina peor que la económica. Mi pequeña aportación es ‘La tesis prohibida’, y todavía te queda una semana para leerla antes de votar, lo cual es muy recomendable.