Le disparó con una pistola eléctrica, la ató, la amordazó y la enterró viva porque estaba “aburrido” de su pareja. Este es el truculento caso de Michelina Lewandowska, de 27 años, y el que fuera su novio, Marcin Kasprzak, de 25.

Kasprzak, según un tribunal de Leeds, en Reino Unido, la llevó a un bosque y la sepultó el pasado mayo y ella, finalmente, logró escapar y denunciar el hecho, explica la BBC. Su pareja obtuvo la ayuda de un amigo, Patryk Borys, de 18 años, para trasladar y enterrar el cuerpo, que estaba encerrado en una caja que hacía las veces de ataúd.

“En pocas palabras, este caso es el de un joven que se aburrió de su pareja, la madre de su hijo, y decidió deshacerse de ella”, explicó Jonathan Sharp, el abogado acusador. Según su relato, Lewandowska fue atacada con una pistola Taser de 300.000 voltios, la ató y la amordazó con cinta adhesiva para después “encerrarla” en una caja. “Y después la enterraron viva”, asegura. La explicación de Kasprzak ante el tribunal fue la siguiente. Según sus palabras su mujer no era tan guapa como las chicas que veía en el gimnasio que frecuentaba.