Miley Cyrus trae de cabeza a su papá
No sabía Miley Cyrus lo que pesaba cuando aceptó la corona de nuevo ídolo juvenil. Mientras era la niña Hannah Montana no hubo ‘peros’. El problema llegó cuando quiso deshacerse del personaje. La Miley adolescente -y persona- no gusta tanto. A los chavales sí, a los que no convence es a los padres, que no ven en ella el mejor ejemplo a seguir para sus retoños. Por convencer, Miley no convence ni a su padre.
Billy Ray Cyrus salió ayer a dar la cara en Twitter a cuenta del vídeo que circula estos días por la red y en el que aparece la cantante fumando hierba en una reunión con amigos: «Lo siento chicos. Acabo de ver este tema por primera vez. Estoy muy triste. Hay muchas cosas más allá de mi control ahora mismo», se sincera su padre. Las imágenes duran minuto y medio y en ellas aparece Cyrus partiéndose de risa entre calada y calada de la cachimba. Lo que fuma es salvia, una «droga preocupante», dicen los activistas anti droga.
La salvia es legal en California, donde se grabaron las imágenes, aunque ya intentaron prohibirla: «Haces cosas increíblemente locas (cuando consumes salvia). Miley es una estrella y los niños van a emular su comportamiento», lamentan los detractores. Miley, mientras tanto, mantiene un mutismo muy propio también de los adolescentes.