El fiscal se querella contra el imán de Tarrasa por decir en un sermón: “¡Amonestad a las mujeres rebeldes, dejadlas solas en el lecho, pegadlas!”
El fiscal de Delitos de Odio y Discriminación en Cataluña ha interpuesto una querella criminal contra el imán de Tarrasa (Barcelona) Abdeslam L., acusado de incitar a la violencia contra la mujer.
En la querella, presentada ante el juez decano de Tarrasa, el fiscal de Delitos de Odio y Discriminación en Cataluña, Miguel Ángel Aguilar, acusa al imán de incitar a la violencia contar la mujer en sus sermones en la mezquita de Tarrasa.
El imán fue denunciado a principios de marzo por instar a los fieles de su mezquita a “corregir” con actos de violencia física y psíquica las “conductas desviadas” de sus mujeres y fue citado el pasado 6 de marzo a declarar ante los Mossos de Esquadra, aunque se negó a testificar.
Según consta en la querella presentada por el fiscal de Delitos de Odio y Discriminación, el imán, aprovechándose de su papel como “guía espiritual” y “autoridad moral” para los musulmanes profirió en sus sermones expresiones que incitan a la violencia y a la discriminación contra las mujeres bajo el argumento de que “en el islam, los golpes son una práctica tolerable”.
En sus sermones, que el imán impartió en árabe y que han sido traducidos al castellano en sede policial, Abdeslam L. profirió expresiones en las que en algunos casos directamente incitó a la violencia física y psíquica contra la mujer y en otros promovió la discriminación, dando a entender que el hombre ostenta una posición de absoluta superioridad y de control sobre la mujer, según subraya el fiscal en su querella.
Como ejemplo, en su sermón del 16 de diciembre de 2011 Abdeslam L. se dirigió a los 1.500 feligreses que abarrotaban la mezquita -que tiene capacidad para 1.200 personas- para revelarles las soluciones que, según su versión, el islam propone para abordar los problemas “que pasan dentro del hogar”.
Según recoge la querella, el imán sostuvo que, en caso de “desobediencia” o “actitudes malas” por parte de sus mujeres, los hombres musulmanes no deben “precipitarse al divorcio” sino seguir este consejo: “¡Amonestad a aquellas de quien temáis que se rebelen, dejadlas solas en el lecho, pegadlas! Si os obedecen, no os metáis más con ellas, Alá es excelso, grande”.
“Efectivamente el hombre le tiene que enseñar a su esposa las obligaciones y los deberes que Dios nos ha dictado. Si no acata estas obligaciones, el paso siguiente es que el hombre deje sola a su esposa en el lecho, solamente en el lecho, negándole las relaciones sexuales, pero no debe dejarla sola y abandonarla en el resto de las habitaciones del hogar”, defendió el imán, según la transcripción que consta en la querella fiscal.
“Y si, hermano, con este método no se soluciona el conflicto -prosiguió-, pues tienes que acudir a los golpes, ¿cómo son estos golpes? Los golpes no son los que provocan las fracturas de los huesos, no son los que hacen correr la sangre, no son los golpes en la cara…no”.
El imán que, según los agentes infiltrados, no leía ningún texto y además gesticulaba sobre cómo golpear, abundó en sus consejos para que los golpes no dejaran señal: “no afees, no golpees en la cara, no hagas correr la sangre, esto es el islam. Puede ser que en algunos momentos los golpes se limiten a dar golpes con el siwak (una barra de manera que tiene la medida de un dedo)”.
“En el islam -agregó el imán- los golpes son una práctica tolerable, pero los golpes tienen límites a los que se llega cuando las otras soluciones no son efectivas. Estos métodos o vías que utiliza la persona para solucionar estos conflictos tienen que ser discretos, que nadie sepa de ellos fuera de la vida conyugal”.
En aquel mismo sermón, el imán denunció que una de las causas del divorcio es que la mujer “sale a la calle a trabajar y se convierte en una mujer independiente, con su propia cuenta bancaria, quedándose los niños sin educación”.
“Esta mujer que tiene su propia independencia, que tiene trabajo y dinero, mira al hombre con una mirada de desprecio. El hombre en este caso tiene que trabajar también en casa, como preparar la comida y lavar la ropa, y esto conlleva a una ruptura y conflicto entre el hombre y la mujer”, censuró el imán.
Posteriormente, en su sermón del 20 de enero de 2012, advirtió a los feligreses de que en España hay unas leyes contrarias a la doctrina islámica y avisó que aunque la mujer, las chicas o los hijos puedan llamar a la policía, “en el día del juicio final no habrá nadie que las pueda cubrir”.
Según los agentes infiltrados, los días que grabaron los sermones la presencia de mujeres era meramente testimonial, ya que no llegaban a las cincuenta entre unos 1.500 fieles.
Es tremendo comprobar cómo las feministas odian a España más aún de lo que odian a los hombres.
Mensaje a todos los imanes y a todos los morunos en general:
NUESTRAS MUJERES SON LO MEJOR QUE TENEMOS, SON LA LUZ QUE NOS ILUMINA, SON LA MOTIVACION QUE NOS HACE MOVER CADA DIA, SON NUESTRAS MADRES, NUESTRAS HERMANAS Y NUESTRAS AMIGAS Y COMPAÑERAS, ADEMAS DE SER LO MAS BELLO DE LA FAZ DE LA TIERRA. O sea que ya sabeis morunos amargados, vuestro mensaje y vuestras maneras A LA MIERDA !!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
IMAN DE MIERDA OJALA EL FISCAL TE DE BIEN POR EL CULO MAMON.
No sé si este imán de Terrassa es salafista (wahabita), pero habrá que andar con mucho cuidado para que no le sustituya un imán salafista que NO SE DEDIQUE ÚNICAMENTE a decir cómo “corregir” a las mujeres.
En un primer momento, los medios de “comunicación” de masas hablaron de que las pesquisas de la fiscalía se habían producido por un chivatazo que habría surgido de alguno de los musulmanes que acudían a sus sermones. ¿Quién nos dice que este musulmán chivato no es salafista?
¿Porqué habrán tenido que venir estos malnacidos a irrumpir en nuestras vidas ? ¿Porqué tenemos que soportar a semejante raza despreciable ? Al igual que ellos hacen con nosotros, deberíamos hacerles la vida imposible, pero por desgracia aqui siempre tenemos a algun soplagaitas que les ríe las gracias. Imán !! para que te enteres, aqui a las mujeres las tenemos en un pedestral y son lo mejor que ha hecho Dios. Si tú no quieres verlo asi, vas y te cuelgas.
Perfecto. Supongo que seguirán con el arzobispo de Granada que dijo que a las mujeres que abortaran se las podía violar. O con la revista Alfa y Omega que decía que si hay sexo por placer se debería despenalizar la violación. Si es que las religiones “del Libro” tienen estas cosas…
Lo bueno sería que a este cerdo con funda le tocara una jueza en su juicio y de jurado a doce amas de casa con caracter español puro. Seguro que se le pasarían las ganas de vomitar excrementos por su boca al maldito imán éste de las narices.
Muy juicio con lo que dices, pero siempre y cuando, la jueza y las doce damas del jurado, siempre y cuando fueran auténticas mujeres con carácter español, vamos, de las que se pasan a los hombres por el forro, por no decir palabras fueras de contexto, que me quedo con las ganas.
Porqué anda, que si son un grupito de perroflautas, mejor que ni lo juzguen, estas encima piden indemnización por daños morales.
Que acaso no sabes que más de una de ellas, los tienen cada noche en sus camas.
Ojalá.. pero a lo mejor le toca un juez de estos antifeministas que no solo cree lo que dice este imán sino que hasta lo ha practicado, esto que creen que hay que pegarles a las mujeres, españolitos de los de antes, de cuando las mujeres aquí en españa estaban solo y para servir a sus maridos… y no solo lo absulve sinó que además lo premia con una columna machista en Alerta Digital porque tenía un gran amigo en ese medio y justa faltaba uno….
¿Ha dicho algo Elena Valenciano? ¿y Llamazares? no, ¿verdad?
Quizás Bibiana Aido desde su puesto de Defensora de las Mujeres ricas en la ONU, en NY no se ha enterado que si no… que si no…pobre imán… como decía zapatero mmm!!, mmm! que no me vengan con recortes…
y si se entera la de la Voga, ufff! pobre imán… le lanza una mirada como las que lanzaba a los peiodistas que flipa… mmmm, mmmm, mmmm.
Bien hecho !!! Todo el peso de la ley y camino de vuelta a su país para este enjendro salvaje.